miércoles, 22 de diciembre de 2010

Estimado amigo:

Ya va acabando este trimestre y con él finaliza también el Adviento. Seguro que cuando comenzó este tiempo creías que iba a ser muy duro, pero ya ves que no es así.

En esta última semana sería bueno fijarnos en la figura de Jesús. Como bien sabes, el tiempo de Adviento finaliza con el nacimiento de nuestro amigo Jesús, y en esta cuarta semana estaría bien que preparásemos todo muy bien para que el niño Dios este cómodo. ¿Te has acordado de los compromisos de las otras tres semanas? Bueno, si lo has hecho, está muy bien; y si no, aún tienes tiempo para ultimar esas cosas que no has podido hacer antes. Si fuera un amigo tuyo a tu casa, ¿le dejarías tus peores videojuegos o tu peor skate? ¡Por supuesto que no! Por tanto, a Jesús también tenemos que darle lo mejor de nosotros.

Como ya sólo quedan tres días para que nos reunamos en familia para celebrar la venida del niño Dios a nuestras casas; debes hacer una cosa en la cena: hacer presente a Cristo, como por ejemplo, bendiciendo la mesa, colocando un niño Jesús en medio… Estas son pequeñas cosas que podrías realizar como compromiso.

Y por cierto, como sabrás, el día veinticuatro por la noche se celebra la Misa del gallo, también llamada de medianoche. Esta es la festividad en la que nace Jesús, y por tanto, es muy importante que no te olvides de ir a esta celebración tan bonita. Te la recuerdo porque no es a la hora de siempre, si no por la noche; pregúntale a tu cura cuándo es, ¿De acuerdo?

¡Espero que lo pases bien y que tengas un buen inicio de las vacaciones de Navidad!


miércoles, 15 de diciembre de 2010

¡YA ESTAMOS CERCA!


Querido amigo:

No hemos olvidado que estas esperando la revisión del compromiso y las novedades del tiempo de adviento, pero como ya sabes, hay veces que el tiempo pasa que vuela y no puedes hacer todo lo que quieres hacer; pero ya estamos de nuevo por aquí.

En primer lugar, ¿sabes en que semana de adviento estamos ya? ¡Es la tercera! Cabe destacar en estos días la festividad de la Vírgen de la Esperanza. ¿Por qué se celebra esta fiesta? Porque es la Vírgen María la que esperó más felizmente la venida de Jesús al mundo. Esto es para nosotros una gran noticia, porque nos da ejemplo de cómo tenemos que seguir esperando al niño Dios.

Todo esto, ¿a qué viene? Pues que como estas viendo ya se acerca el día 25…y no sé muy bien si estamos bien preparados….quizás tengamos que seguir con otro compromiso para que el niño Jesús tenga una buena cuna donde poder venir ese día. Esta semana es fácil; tienes que sacar todas las mañanas cinco minutillos para rezar la siguiente oración:

ANGEL DE MI GUARDA, BAJO VUESTRA PROTECCION ME PUSO DIOS, CON MUCHO CARIÑO. A TI QUE SOY TU ENCOMENDADO, GUARDAME, GUIAME Y PROTEGEME.

Creo que tú lo vas a hacer bien, por que siempre lo intentas. ¡Anímate y ya me contarás! Recuerda que lo importante es prepararnos para Jesús; Él te conoce muy bien, y seguro que vendrá a tu corazón.

Un saludo amigo.

martes, 7 de diciembre de 2010

¡Happy birthday, María!


Hola monaguill@, ¿sabes por qué tenemos un puente tan largo? Porque celebramos la Constitución y la fiesta del nacimiento de María. ¿Y por qué el nacimiento de María es tan importante? Porque Jesús tenía que nacer de alguien muy bueno y muy generoso, es decir, alguien sin pecado original. Esta festividad se celebra en adviento porque María, al igual que nosotros, esperó la venida de Jesús. Y por ello se preparó de la mejor forma posible, ya desde su nacimiento.


Como habrás podido comprobar el domingo, se encendió la segunda vela de la corona. Esto quiere decir que ya queda una semana menos para Navidad, ¡cada vez está más cerca la venida de Jesús!


¿Qué tal el pequeño compromiso de la semana pasada? ¿fue fácil? como seguro que sí, aquí va el segundo: Rezar tres Avemarías por la noche, antes de dormir. ¿No es muy complicado, verdad? Seguro que lo haces bien. ¡Ánimo!

martes, 30 de noviembre de 2010

Tres, dos, uno... ¡Feliz Año Nuevo!


Pues sí, querido amigo, el domingo anterior dimos paso a un nuevo año litúrgico, pero ¿qué es esto?. Empecemos por el principio: un nuevo año, es el principio de una nueva etapa. Es cierto que nosotros empezamos el año el 1 de enero, pero en la Iglesia se empieza en noviembre tras la celebración de Cristo Rey, que este año fue el 21. ¿A qué viene todo esto? La respuesta es: ¡HEMOS EMPEZADO EL ADVIENTO!



...y ¿Esto que significa? Que hemos entrado en un tiempo en el que nos preparamos para la venida de Jesús. Este tiempo, que dura cuatro semanas, nos tiene que ayudar a ser mejores. ¿Cómo mejoramos? Poniéndonos unos pequeños compromisos a realizar cada semana. El primero podría ser: "Compartir tu tiempo y jugar con todos los compañeros de clase".



¿Te animas?


jueves, 14 de octubre de 2010

El Papa se encuentra con los monaguillos.


Este verano en agosto el santo Padre se juntó en Roma con monaguillos de todo el mundo. Cerca de cincuenta y tres mil muchachos, entre los 14 y 25 años de edad. Uno de los momentos importantes fue cuando el Papa bendijo una enorme imagen de San Tarsicio (Patrón de los monaguillos) y les dirigió las siguientes palabras:
“Me dirijo a vosotros, aquí presentes, y por medio de vosotros a todos los monaguillos del mundo. Servid con generosidad a Jesús presente en la Eucaristía. Es una tarea importante, que os permite estar muy cerca del Señor y crecer en una amistad verdadera y profunda con él. Custodiad celosamente esta amistad en vuestro corazón como san Tarsicio, dispuestos a comprometeros, a luchar y a dar la vida para que Jesús llegue a todos los hombres. También vosotros comunicad a vuestros coetáneos el don de esta amistad, con alegría, con entusiasmo, sin miedo, para que puedan sentir que vosotros conocéis este Misterio, que es verdad y que lo amáis. Cada vez que os acercáis al altar, tenéis la suerte de asistir al gran gesto de amor de Dios, que sigue queriéndose entregar a cada uno de nosotros, estar cerca de nosotros, ayudarnos, darnos fuerza para vivir bien. (…) Realizad con amor, con devoción y con fidelidad vuestra tarea de monaguillos. No entréis en la iglesia para la celebración con superficialidad; antes bien, preparaos interiormente para la santa misa. Ayudando a vuestros sacerdotes en el servicio del altar contribuís a hacer que Jesús esté más cerca, de modo que las personas puedan sentir y darse cuenta con más claridad de que él está aquí; vosotros colaboráis para que él pueda estar más presente en el mundo, en la vida de cada día, en la Iglesia y en todo lugar. Queridos amigos, vosotros prestáis a Jesús vuestras manos, vuestros pensamientos, vuestro tiempo. Él no dejará de recompensaros, dándoos la verdadera alegría y haciendo que sintáis dónde está la felicidad más plena.”